Frecuencia sexual (Parte III)

Frecuencia sexual (Parte III)

Pedro Rondón Navas (*)

La falta de deseo sexual puede ser una conducta que como vimos anteriormente puede presentarse en el varón o en la mujer. Aparte de las causas psicológicas mencionadas puede deberse a un problema fisiológico, por ejemplo si la mujer se queja de dolores y falta de lubricación durante la penetración (vaginismo), endometriosis, menopausia o andropausia.
Esta falta de deseo sexual puede haber estado presente todo el tiempo y la persona jamás haber sentido interés sexual, o puede haberse presentado de repente y antes la persona sentir deseo y ahora no. Pero generalmente no es una patología sino un problema de pareja. Entre las causas más comunes está la falta de afecto y los problemas de pareja: discusiones, peleas, insultos, gritos, maltrato físico y maltrato verbal, falta de comunicación de la pareja.
Para cualquier miembro de la pareja esta situación es insostenible, insoportable y generadora de situaciones de angustia y malestar. Consentir sin tener deseos no hace sino agravar este problema.
Una terapia apropiada, una vez descartados los problemas fisiológicos, debe considerar el diálogo, reeducar sexualmente, incentivar la comunicación, explorar y entrenar en el manejo de técnicas sexuales, incentivar el uso de la fantasía y de juguetes sexuales, prendas u otros implementos de seducción. Ponerse en el lugar del otro y ser solidario es uno de los puntos más importantes. No se puede ser romántico y agradable únicamente cuando se va a realizar el coito. Tenemos que estar dispuestos a escuchar y asumir nuestra responsabilidad si nuestra pareja perdió el interés sexual y por tanto disminuyó su frecuencia sexual.
No espere a que su relación llegue a un punto sin retorno, descuidar a la pareja todo el día y solamente mostrarse interesado en ella cuando se tiene deseo sexual, o pensar que este problema se solucionará solo es ponerse una venda en los ojos. Tener relaciones no debe ser una carga o un compromiso que debe cumplirse para que la pareja no se enoje o para mantener el matrimonio. Debe ser un acto de disfrute y si cae en la rutina sálgase de ella, utilice su creatividad.
(*) Psicólogo- Sexólogo
pedrondonavas@gmail.com
http://www.larazon.com.pe/online/indice.asp?tfi=LROpinion05&td=27&tm=03&ta=2011