09/05/2011
Besar ofrece una sensación de bienestar pero también pueden ser la causa de enfermedades infecciosas: IPN
Lo bueno y lo malo de los besos
Al besar, la secreción de dopamina aumenta en el cuerpo, lo cual se traduce en una mayor sensación de bienestar
Todas las enfermedades infecciosas que se encuentran en el ambiente pueden ser contagiadas mediante las gotas de saliva
Algunos lo definen como un acto de amor expresado a través de los labios, pero los especialistas hablan de ello como unproceso químico que proporciona beneficios y al mismo tiempo causa enfermedades.
El beso, según Omar Jacob Vargas Apaez, médico cirujano maxilofacial del Instituto Politécnico Nacional (IPN), es un intercambio de fluidos salivales compuesto mayoritariamente por agua, sales minerales, proteínas, millones de bacterias y otros organismos.
“Aunque un beso es un acto que puede darse de muchas formas, en distintas partes del cuerpo y con diversos propósitos, dependiendo de la región y la cultura, al consumarse de forma apasionada es capaz de estimular el sistema nervioso central y desata una serie de procesos químicos”, asegura el también catedrático del IPN.
Al besar, la secreción de dopamina aumenta en el cuerpo, lo cual se traduce en una mayor sensación de bienestar.
Además, un ósculo es también capaz de actuar contra la depresión y el dolor, pues estimula el sistema analgésico endógeno y produce endorfinas, las cuales actúan en respuesta de varias situaciones estresantes.
No obstante, el beso también tiene su lado oscuro.
En un comunicado, el médico advierte que todas las enfermedades infecciosas que se encuentran en el ambiente pueden ser contagiadas mediante las gotas de saliva, como la amigdalitis, faringitis, meningitis viral, encefalitis, miocarditis, resfriado común y los dos tipos de influenza: estacional y pandémica.
Aunque no es frecuente en México, la llamada ‘Enfermedad del Beso’ (mononucleosis infecciosa) también se puede transmitir mediante las secreciones orales.
De cualquier manera, una adecuada higiene bucal: con un cepillado adecuado, uso diario de hilo dental y una visita periódica al dentista; puede prevenir enfermedades y dejar a los besos actuar libremente y en beneficio del organismo.
El beso, según Omar Jacob Vargas Apaez, médico cirujano maxilofacial del Instituto Politécnico Nacional (IPN), es un intercambio de fluidos salivales compuesto mayoritariamente por agua, sales minerales, proteínas, millones de bacterias y otros organismos.
“Aunque un beso es un acto que puede darse de muchas formas, en distintas partes del cuerpo y con diversos propósitos, dependiendo de la región y la cultura, al consumarse de forma apasionada es capaz de estimular el sistema nervioso central y desata una serie de procesos químicos”, asegura el también catedrático del IPN.
Al besar, la secreción de dopamina aumenta en el cuerpo, lo cual se traduce en una mayor sensación de bienestar.
Además, un ósculo es también capaz de actuar contra la depresión y el dolor, pues estimula el sistema analgésico endógeno y produce endorfinas, las cuales actúan en respuesta de varias situaciones estresantes.
No obstante, el beso también tiene su lado oscuro.
En un comunicado, el médico advierte que todas las enfermedades infecciosas que se encuentran en el ambiente pueden ser contagiadas mediante las gotas de saliva, como la amigdalitis, faringitis, meningitis viral, encefalitis, miocarditis, resfriado común y los dos tipos de influenza: estacional y pandémica.
Aunque no es frecuente en México, la llamada ‘Enfermedad del Beso’ (mononucleosis infecciosa) también se puede transmitir mediante las secreciones orales.
De cualquier manera, una adecuada higiene bucal: con un cepillado adecuado, uso diario de hilo dental y una visita periódica al dentista; puede prevenir enfermedades y dejar a los besos actuar libremente y en beneficio del organismo.
Fuente: Con información de elarsenal.net
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